3 consejos contra la caída del tráfico orgánico de Facebook

Los grupos de profesionales del Marketing Online están que arden en la red y han puesto el grito en el cielo con la decisión de Facebook de ahogar el tráfico orgánico para las páginas profesionales. La consecuencia es contundente, para que las publicaciones alcancen a los seguidores hay que pagar. En esa situación, qué podemos hacer (además de rascarnos el bolsillo)? Aquí os dejamos 3 consejos básicos para adaptarnos a las nuevas reglas.

Efectivamente, la primera consecuencia es que si queremos que Facebook tenga un peso estratégico en el branding de nuestra marca y en la promoción de nuestros servicios tendremos que pagar. La verdad es que la nueva actualización del algoritmo tampoco supone un cambio radical. Antes el recurso de la publicidad también era recomendable porque el alcance se reducía a un máximo de un 20% de nuestros seguidores. La diferencia está en la intensidad. Si antes teníamos que pagar habitualmente ahora lo tendremos que hacer siempre (o casi siempre).

Facebook nos cobra la entrada (¿teníamos duda de que era un negocio?) y no deja resquicio para colarnos en la fiesta. Algunos estudios estiman que el cambio del logaritmo provoca una caída del tráfico natural de hasta un 75%, que reduce la audiencia de las publicaciones gratuitas a un menos de un 6% de nuestros fans. Algunos hablan ya de un claro cambio de modelo hacia el Social Business.

Facebook ya está claramente consolidado (y estancado) como el rey indiscutible de las redes sociales, aunque emita los primeros síntomas de agotamiento con el creciente desapego de los jóvenes. Puede imponer el cobro porque al día de hoy no se puede descartar a Facebook en ninguna estrategia de comunicación Online. Lo recomendable es gestionar la red como hasta ahora con los lógicos ajustes. Aquí van nuestras 3 consejos fundamentales:

1. Publicaciones adaptadas al presupuesto. El fin de la gratuidad acaba con las estrategias orgánicas, publicaciones frecuentes con gancho para captar la atención de nuestros seguidores. A partir de ahora, la frecuencia la marca la capacidad de nuestro presupuesto (parece que con la pasta de por medio la plataforma nos asegura su difusión). En favor de Facebook, hay que decir que su publicidad es de las más económicas y que se puede promocionar una publicación a partir de 4 euros.

2. Diversificar las publicaciones en otras redes. No podemos depender únicamente de Facebook en nuestra estrategia corporativa, sería suicida. Los riesgos son evidentes, Facebook podría caer repentinamente o decidir cambios drásticos perjudiciales para nuestra estrategia. Una presencia diversificada en las distintas redes disminuye los riesgos. Además, cada red tiene usos y públicos complementarios que enriquecen nuestra promoción. Por ejemplo, Youtube tiene el poder del vídeo; Twitter es inmediato; Google+ nos mejora el posicionamiento; Pinterest tiene un gran tirón entre las mujeres y es muy visual…..

3. Mantener una comunicación propia. La web corporativa nos asegura nuestra independencia respecto a los vaivenes de las redes sociales. Además, un buen blog es una gran puerta de entrada hacia la web, que nos permita incrementar nuestro tráfico con nuevos visitantes y aumentar las ventas.